“Son días raros y los días que precedieron al 24 de marzo de 1976 también fueron muy raros”, comenzó su columna Roa, quien agregó que se trataba de días de “profunda degradación de los medios de comunicación, que crean sentido, y sobre todo de las estructuras democráticas, y de todo lo que exprese la representación popular, y no solamente los partidos políticos sino también los sindicatos”.
En ese momento, como ahora, la embestida de las corporaciones económicas desataba una profunda inflación que las medidas económicas de Martínez de Hoz y la dictadura impulsarían más aún, se reclamaban medidas urgentes y “el reclamo de medidas urgentes derivó en el golpe”.
Luis Roa recordó como las medias de gobierno dictatorial apuntaron contra trabajadores principalmente, tanto por la represión directa como también mediante la sanción de leyes, como la N°21261, mediante la cual se suspendía, por ejemplo, el derecho a huelga.